Un sábado primaveral, de radiante sol fue el marco perfecto para celebrar el tercer aniversario del consejo en la embajada.
Desde temprano fueron llegando los compatriotas, la conversación y los mates fueron circulando; alegría y compañerismo fue la imágen que inundó la escena durante toda la celebración.
Ya entrada la tarde los sonidos y la poesía celeste se tomaron la embajada para hacernos vibrar y disfrutar: Adrian Diaz, Federico Wolf y el tronar de tambores de Katanga nos regalaron un muy lindo momento.
Y hubo tiempo para todo.... el retruco y vale cuatro, el recuerdo a Benedetti con la inauguración de la Biblioteca, el salu de grapa miel y el chorizo al pan.
Con gran alegría nos saludamos todos los consultimos en este nuevo aniversario. Hoy más que nunca con el compromiso intacto de seguir haciendo ciudadanía en suelo chileno.