sábado, 21 de noviembre de 2009

Rutas de inmigrantes - Análisis









Los patrones migratorios mundiales han cambiado en los últimos años, al disminuir las migraciones de sur a norte y aumentar los movimientos sur-sur, alertó en Costa Rica la Organización Internacional de la Migración (IOM). En el caso de América, "estos cambios de movimientos migratorios se han acentuado desde el atentado del 11 de setiembre de 2001 en Estados Unidos, cuando este país cerró más sus fronteras", declaró a Efe la directora de comunicación de la OIM en Washington, Niurka Piñera.

"Los nuevos patrones migratorios se dan entre la gente más pobre que no tiene dinero para viajar a los países desarrollados y se incrementan con el cierre de fronteras o el mayor control de la inmigración en los estados del norte", dijo Piñera, que participa en un encuentro sobre migración que reúne a 20 países de América.
Piñera aseguró que se estima que en todo el mundo en "2005 cerca de 62 millones de personas emigraron de sur a norte, mientras que entre unos 61 y 64 millones lo hicieron de sur a sur". Por ejemplo, "el 69 % de los emigrantes africanos se mueven dentro del mismo continente", explicó la representante de la OIM.

Piñera indicó que en América Latina se calcula que hay tres millones de emigrantes intra-regionales y que a menudo éstos se trasladan a vivir a países vecinos.
La funcionaria de OIM informó que los países con mayor índice de inmigrantes intra-regionales en América son Argentina, Venezuela y Costa Rica, aunque no detalló la cifra exacta. En el caso de Argentina la migración tradicional era la proveniente de Paraguay, mientras que ahora también se ha incrementado la procedente de Bolivia, Perú, Chile y Uruguay.

Piñera indicó que según datos de 2006, se calcula que hay unos 610.000 colombianos viviendo en Venezuela y cerca de 227.000 nicaragüenses establecidos en Costa Rica. La representante de la OIM resaltó que otra de las novedades en los patrones migratorios es que todos los países se han convertido en emisores de inmigrantes, así como receptores y sitios de tránsito para los que se trasladan a otros estados.
"Por ejemplo, Costa Rica siempre ha recibido a inmigrantes nicaragüenses porque es una economía sólida, pero ahora estamos registrando que muchos de estos nicaragüense van a Panamá a trabajar en la remodelación del canal, por lo que Costa Rica se convierte en un país de paso", dijo Piñera.

Además, explicó que Costa Rica recibe US$ 600 millones en remesas al año, el 80 % procedente de Estados Unidos, mientras que tan solo salen del país 300 millones en remesas, el 70 % hacia Nicaragua, "lo que denota que Costa Rica también es un país emisor de emigrantes".

Piñeda indicó que la crisis económica de Estados Unidos "ha hecho que disminuya el envío de remesas a países latinoamericanos entre un 7 y un 9 %". Esto se debe a que la población latinoamericana residente en Estados Unidos trabaja en la construcción y en el sector de servicios, los campos más afectados por la crisis.

Publicado hoy en el Observador